<A menudo nos creemos en la obligación de juzgar lo que no conocemos, sin disponer para ello de datos objetivos. Sin escuchar.
E ra una calurosa mañana de viernes del mes de agosto y acababan de dar las 12 en el reloj de la iglesia de San Juan. Diminutos
puntitos de colores se movían sin parar en torno a mí en todas direcciones y el
correr vertiginoso del día se hacía cada vez más evidente. La hora más activa del día
y aquel maldito autobús sin llegar. La gente impaciente por el retraso, se
arremolinaba nerviosa con intención de
subir en busca de descanso a tanta espera inútil. Normalmente
me molestaba y aturdía el barullo –hoy- esa sensación era mucho más palpable.
2003
A qué negarlo, lo hacemos absolutamente todos en algún momento.
Actuando para ello con absoluta intransigencia, prepotencia y arrogancia, siendo entonces jurados y jueces de historias que no nos atañen…
No estaría de más entonar un Me Culpa, aunque sea de vez en cuando>
-Samarcanda-
No estaría de más entonar un Me Culpa, aunque sea de vez en cuando>
-Samarcanda-
JUICIOS Y
PREJUICIOS (Relato Corto)
Al fin pude ver el bus aproximarse a lo lejos. Este se había demorado más de lo habitual, ya llevaba esperando cuarenta y cinco minutos que -en mi actual confusión- se
me antojaron varias horas. Notaba como las piernas me temblaban intuyendo estar al borde de la extenuación. Froté mis manos e instintivamente con
una de ellas me palpé la cara; un escalofrió recorrió mi cuerpo al comprobar
que era puro hielo.
Escuchaba
de fondo el sonido de sus voces ya convertidas en eco enloquecedor -casi en un
sueño- y aunque sabía que estaban ahí, intentaba ignorarlos, deseando que no
formaran parte de ese espacio que compartíamos inevitablemente. Un devenir
cotidiano envolvía la ciudad repleta de prisa y ruido.
Caminaba
sola en mi mundo particular; o tal vez nada a mí alrededor me sugería el
suficiente interés como para levantar la vista. Eso, en el caso que hubiera
sido dueña de mi voluntad. En esos momentos mis ojos eran dos
lunas de hierro con decisiones propias, sin importarles lo más mínimo lo que yo
deseará...(SIGUE)
2003
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